La pérdida acelerada de la biodiversidad y la destrucción de los ecosistemas se ha convertido en una de las más grandes preocupaciones actuales en los países tropicales y en general en el mundo entero. Las consecuencias de las actividades antrópicas sobre la fauna, flora y los servicios ecosistémicos en una determinada región se ven reflejados en todos su contextos: biológicos, históricos, económicos y culturales; debido a múltiples factores como el deterioro ambiental, el uso irracional y la falta de oportunidades para las comunidades usuarias de los recursos.
Las políticas actuales en el país, privilegian como estrategia general el Sistema Nacional de Áreas Protegidas, en donde la concertación con las comunidades resulta de vital importancia para generar modelos de administración de los recursos naturales de tal manera que se posibilite su conservación y recíprocamente el mejoramiento de la calidad de vida de las comunidades humanas asentadas en estas áreas de interés ambiental.
Dentro de esta política, CORPOGUAJIRA adelanta la definición de la condición de diferentes áreas de importancia para la protección de la biodiversidad el área de su jurisdicción. Dada la importancia de conservar estas áreas se propone el estudio para la declaratoria como áreas protegidas en el sector de Caracolí y Sabana de Manuela, basado en un completo programa de articulación con los diferentes actores que por su naturaleza productiva o por su condición natural son responsables del desarrollo de la zona. Las metodologías a emplear combinan la realización de estudios de caracterización biofísica y socioeconómica, así como la constante interacción con los diferentes actores para la construcción del plan de manejo del área a proteger.
Adicionalmente y con miras a la implementación de estrategias de conservación para la región, se plantea de forma conjunta la formulación del Plan de manejo Ambiental de la Reserva Forestal Manantial de Cañaverales en el marco de la Resolución 2372 de 2010 y las directrices 2014 del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible para Reservas Forestales Protectoras; debido a que es una zona que constituye la más alta importancia estratégica para la población residente de este corregimiento ya que de esta depende el abastecimiento de agua para consumo humano y desarrollo de actividades de producción agropecuaria de cerca de 2.000 pobladores que allí habitan (CORPOGUAJIRA-CI, 2012).
En efecto la totalidad de la población del corregimiento de Cañaverales se abastece del acuífero que aflora en este manantial, el cual es generado por la filtración de agua subterránea almacenada en sedimentos cuaternarios, la filtración de aguas lluvias y muy posiblemente la filtración de agua proveniente del río Cañaverales.
A nivel municipal, el “Manantial de Cañaverales” está catalogado como un área de manejo de especial e igualmente como una zona de reserva y/o protección según lo establece el Plan Básico de Ordenamiento Territorial del municipio de San Juan del Cesar (2009). De la misma manera hace parte de las áreas prioritarias para conservación del Sistema Local de Áreas Protegidas del Municipio, el cual fue adoptado mediante el Acuerdo 014 del 30 de mayo de 2009 del Concejo Municipal de San Juan del Cesar. Adicionalmente, el PBOT del municipio estableció la posibilidad de constituir en el “Manantial de Cañaverales” un Jardín Botánico, como un espacio destinado a la conservación de la biodiversidad y a la implementación de programas de educación, investigación y recreación, entre otros.